lunes, 10 de agosto de 2015

Entra en Servicio el Programa: Bibliomaletas de la BNP dirigido a las bibliotecas de los Establecimientos Penitenciarios


En 1956 el historiador Jorge Basadre como Ministro de Educación Pública, invita a la Bib. Carmen Checa de Silva a poner en práctica un programa experimental que buscaba acercar y promover la lectura y el libro a los ciudadanos de Lima.  Este proyecto pionero se mantuvo vigente, hasta los años ochenta.


El servicio de lectura en cárceles se inicia bajo dicho programa experimental, en la década de los 70 se vio fortalecida con el apoyo de las colecciones del servicio de Bibliobús.    Durante la década de los 80, el Sistema Nacional de Bibliotecas, siguió apoyando al desarrollo de las bibliotecas penitenciarias, consistente en donativos de libros para los fondos de las bibliotecas existentes en cada penal, así como cursos de capacitación para el personal encargado de este servicio.  En 1985 se realiza el Diagnóstico sobre servicios bibliotecarios en prisiones, para la mejora de los mismos,  como parte de la readaptación y reeducación de los internos, y en 1986 se firma el primer Convenio entre el INPE y la Biblioteca Nacional del Perú.

En la década del 90 hasta  principios del año 2005, la asistencia técnica a bibliotecas penitenciarias queda paralizada.  Recién a mediados del 2005, la Lic. Sara Hernández  González propone a la DEBAE reactivar el servicio, el cual fue visto con buen agrado, considerando que el Código Penitenciario tipifica que las bibliotecas existentes en cada establecimiento penitenciario, estén a cargo de los CETPRO en coordinación con la Sub-Dirección de Educación del INPE.

En el 2006, la DEBAE propone ejecutar el Proyecto Lectura sin fronteras, que consiste en prestar publicaciones donadas por terceros en forma itinerante; el cual contó con la aprobación de las autoridades de turno, iniciando un servicio mejorado de préstamo de libros a los Establecimientos Penitenciarios. 

En los años 2007 se oficializan las actividades con las bibliotecas de los establecimientos penitenciarios mediante la suscripción de un segundo Convenio Interinstitucional BNP-INPE con una vigencia de cinco años, situación que permitió continuar con el servicio de “Maletas viajeras” hasta el 2008.

En el año 2009,  la DEBAE se ve precisada a suspender este servicio, debido a que sus funciones no le permite acopiar nuevas publicaciones, situación que limita la actualización de contenidos de las maletas viajeras.  Por ende, para dar continuidad al servicio iniciado, se dispuso que la atención del servicio de maletas viajeras pasara  a la DESBP -Dirección de Servicios Bibliotecarios Públicos, reanudándose este servicio de préstamos de libro, en el año 2012 hasta la fecha; los libros proporcionados en la maleta de la DESBP, son parte de sus propios fondos bibliográficos, ubicados de la BNP (sede Av. Abancay).

En la actualidad, el servicio de lectura en cárceles se ha cuajado con el Programa: Bibliomaletas, que con el apoyo del Comité Internacional de la Cruz Roja Internacional,  se vio fortalecido con colecciones nuevas y diversas para atender la demanda de los usuarios, y el desarrollo de lectura viva, para contribuir al mejoramiento de los procesos de lectura y escritura en espacios de intramuro.   

El lanzamiento del Programa: Bibliomaletas se realizó 4 de agosto y la entrega de las primeras maletas tuvo lugar en el E.P. Ancón II, el día 06 de agosto pasado.

Este proyecto no se hubiera materializado sin el decidido empuje de los pioneros:  Sara Hernández González, Álvaro Tejada Sánchez, Gabriela Morales Contreras, José Soriano, Daniel Fernández, entre otros.   En la actualidad colaboran con mucha dedicación, entrega y coraje para llevar a cabo el Programa: Rosa Facio y Cecilia Ferrer, Mauricio García-Arrese Aliaga y Henry Chávez.






Lanzamiento del Programa: Bibliomaletas: autoridades y usuarios

Testimonio de los usuarios del Programa




Encuentro emotivo de usuarios con familiares

Autoridades invitadas al lanzamiento del Programa: Bibliomaletas

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